Vivo en Villa María. Escribo. Desde siempre escribo. Todo el tiempo escribo. Aunque no lo lleve al papel escribo. Mis pensamientos son poemas, historias permanentes de palabras que podrían ser escritas (aunque no lo crean, corrijo mis pensamientos como corrijo lo que escribo ¿pienso como una prueba de galera? esta autobiografía –qué palabra- me está revelando secretos).
También cuento. Soy narradora oral escénica. Cada vez que cuento cumplo el sueño de compartir literatura. Conjugo el solitario acto de leer con la incomparable sensación de compartir, pero compartir desde lo inconmensurable, como una ofrenda.
Escribir y contar: mi vida.
Tengo publicado mi primer poemario, Pecado original, gracias a que obtuve el Primer Premio en el concurso “Victoria Siempre 2007” en el marco del V Encuentro de Arte y Poesía “De las Siete Colinas” en Victoria, Entre Ríos.
Si Dios quiere, este año saldrá mi segundo poemario: Excarcelada.
Hay un tercero que ya tiene alma, Cómo, Dónde Cuándo. Tal vez, algún día, encuentre su cuerpo. Si no, andará dejando caer sus chispitas en el espacio que me regale algún amigo, esos que nunca faltan, los que con su generosidad nos evitan el silencio.
A los que alguna vez –antes, ahora, después- me regalen un minuto de sus vidas para leerme, la más bella de las palabras: gracias.
.Su trabajo.
Esa tarde
mi hermana compró aceitunas
muchas
el fruto de su trabajo
(del libro inédito "Excarcelada")
* - * - * - * - * - *
.Sólo una vez.
Hay un día que no termina nunca
ubérrimo día
ese día
las yemas de tus dedos pequeños
dibujan en mi cara una casita
con chimenea
cerca de la oreja izquierda
un árbol
y aquí
donde brinca el cascabel
la mariposa
-con antenas y todo- decís
te miro
tancercatanhermosa
tanto y tanto
la ausencia me aconsejó este despropósito
esta corrupta manera
de quedarme
para siempre
con tu pincel.
(del libro inédito "Excarcelada")
* - * - * - * - * - *
Donde
ni siquiera
hay lugar para
uno
amontonan sus
nadas
tantos.
(del libro inédito "Cómo Dónde Cúando")
* - * - * - * - * - *
Cuando
este desvelo de
costura y despojo
me florece
almácigo
la felicidad.
(del libro inédito "Cómo Dónde Cúando")
verdes
negras
aceitunas
me gustaban mucho las aceitunas
me gustaban tanto
las comió todas
sentada en la punta de la mesa
les chupó el corazón
uno a uno
negras
aceitunas
me gustaban mucho las aceitunas
me gustaban tanto
las comió todas
sentada en la punta de la mesa
les chupó el corazón
uno a uno
hasta desangrarlos
el fruto de su trabajo
dijo mi madre.
(del libro inédito "Excarcelada")
* - * - * - * - * - *
.Sólo una vez.
Hay un día que no termina nunca
ubérrimo día
ese día
las yemas de tus dedos pequeños
dibujan en mi cara una casita
con chimenea
cerca de la oreja izquierda
un árbol
y aquí
donde brinca el cascabel
la mariposa
-con antenas y todo- decís
te miro
tancercatanhermosa
tanto y tanto
la ausencia me aconsejó este despropósito
esta corrupta manera
de quedarme
para siempre
con tu pincel.
(del libro inédito "Excarcelada")
* - * - * - * - * - *
Donde
ni siquiera
hay lugar para
uno
amontonan sus
nadas
tantos.
(del libro inédito "Cómo Dónde Cúando")
* - * - * - * - * - *
Cuando
este desvelo de
costura y despojo
me florece
almácigo
la felicidad.
(del libro inédito "Cómo Dónde Cúando")
palabra poética que no miente emociones, sube el telón de su talento puro y expresa con naturalidad y belleza, como si nada. bellísimo, en superlativo. mi cariño y mi admiración. susana zazzetti.
ResponderEliminarFelicitaciones,Alicia,contundentes tus poemas.Cristina Pablos
ResponderEliminarIntensos y fuertes poemas Alicia. El quiebre de los versos carga de mayor sentido el contenido. Saludos.
ResponderEliminarnicolás j.
Siempre me ha sorprendido el cuidado de tu palabra, puntual y exacta, generosa en expresión y con bellísimos resultados.
ResponderEliminarDespués de leer esta introducción crece más mi admiración. Creo que se transparenta tu persona.
Un fuerte abrazo.
Mercedes Sáenz
como siempre me pasa con tu poesía, Alicia... llevás al que lee a una zona profunda de mirada clara y simple, aquietás los ruidos y dejas que sola, sin mas ayuda que las palabras esenciales, salga a la luz... la poesía!
ResponderEliminargracias entonces por eso, una vez mas.
Hermosos poemas a flor de piel. Felicitaciones. Andres Velo
ResponderEliminarAlicia:
ResponderEliminarMe encantó el primer poema. Duro, certero y encantador al mismo tiempo. Una pincelada de la maldad digerida.
Saludos
Juancito Seia
Alicia, es un placer haberte escuchado narrar y ahora, leerte.
ResponderEliminarNora Baker Zandrino
No sé si a Alicia Perrig le importe mi comentario, pero esta es una bellísima poesía, la de las aceitunas me mató y seguramente su libro inédito será tan bueno como el primero. Brindo, por la buena poesía!
ResponderEliminarLily Chavez
Siempre importan los comentarios que suman, Liliana. Siempre.
ResponderEliminarGracias
Alicia Perrig
Gracias Ali, bellísimo leerte siempre.
ResponderEliminarUn abrazo Gus.
Siempre leerte es una felicidad, a veces dulce, a veces dolorosa. Disfruté las aceitunas hace días y hoy me quedo con las yemas dibujándome la cara... abrazos!!! Fabiana
ResponderEliminarmuy bueno!!!
ResponderEliminaralicia pastore
¡Qué lección de vida el primer poema! ¡Qué bella manera de ubicar la mezquindad en su lugar! Cada palabra en la poesía que leí tiene su exacta medida y valor en ese sitio, y deja que la mente vuele... Adoré el tercer poema "Donde ni siquiera hay lugar para uno..."
ResponderEliminarGracias por compartir tu arte. Y gracias a D. Falconi por la apertura y la posibilidad de leer obras inéditas.
I. Andrea Matar