Marcelo Dughetti
Me llamo Marcelo Dughetti (40 años). Soy un cuervo embalsamado en el anillo de un gigante.
Tengo esposa e hija que me extrañan y eso es bueno. Trabajo y reviento. Amo y reviento.
Escribo y reviento. Como y reviento. Nada de lo que me dan se cobra barato. Y a nadie dejo pasar sin cobrar peaje. Alma mezquina, dicen los muchachos. Nací como Charly sin poder y con Videla allá por la década del ‘70.
Mis padres no se jugaron por nada. Mis hermanos hicieron lo que pudieron. Aprendí los rudimentos de un oficio inexplicable leyendo a un herrero. Supe algo más sobre la amistad y otras ciudades gracias a Carlos, Iván, Alejandro, Sebastián, Alexis. A ellos agradezco estar de pie. Mi brújula ética son las Madres de Plaza de Mayo. El lugar en el que vivo, está rodeado de poetas, soja y leche.
No soy feliz. El psicólogo me dice que insista, que algún día… Publiqué algunos libros de poesía y narrativa. Hay un mar de desaparecidos que vienen a buscarme la memoria y no puedo comer sin sentir asco. Suelo caminar hacia el horizonte para bajar el colesterol y alcanzar lo que me falta.
.N.
No son necesarios los poetas.
No son necesarios los poetas y menos los malos poetas, no hacen falta.
No con esos cuadernos y las Bic trazo grueso de color verde.
No hacen falta los poetas, no son necesarios.
No con esas lluvias y esos ahogos.
Hace falta eso si la pala que se herrumbra tras los zapallos.
Los días no laborables de la semana santa.
La respiración de un hijo acompasando la sangre.
El pan de una mujer .
Los perros,
los pocos amigos
y el café en la mañana domestica.
.F.
Esta la escopeta de tu padre,
resplandece en la habitación cerrada.
En el silencio suelo imaginar el sonido de este animal de la cultura.
La carnadura del fuego en su vientre frío,
la ternura del nácar tallando un nombre griego
la línea de la desgracia como un platinado presagio
su ilusión de caballo aplastando la vida
los ojos de la desgracia anunciada desde su nacimiento.
* - * - * - * - * - *
* - * - * - * - * - *
.X.
El poeta
Es un saco de mierda.
tirado
al costado de las vías
protegido por perros sarnosos
envuelto en diarios
que no dicen nada.
No son necesarios los poetas y menos los malos poetas, no hacen falta.
No con esos cuadernos y las Bic trazo grueso de color verde.
No hacen falta los poetas, no son necesarios.
No con esas lluvias y esos ahogos.
Hace falta eso si la pala que se herrumbra tras los zapallos.
Los días no laborables de la semana santa.
La respiración de un hijo acompasando la sangre.
El pan de una mujer .
Los perros,
los pocos amigos
y el café en la mañana domestica.
* - * - * - * - * - *
Esta la escopeta de tu padre,
resplandece en la habitación cerrada.
En el silencio suelo imaginar el sonido de este animal de la cultura.
La carnadura del fuego en su vientre frío,
la ternura del nácar tallando un nombre griego
la línea de la desgracia como un platinado presagio
su ilusión de caballo aplastando la vida
los ojos de la desgracia anunciada desde su nacimiento.
* - * - * - * - * - *
.Y.
Vencido me declaro vencido
cierro mi cuaderno muchas veces al día.
Y muchos otros pienso que escribo a pesar de todo
el poema que no leerá nadie
esa palpitación asmática en los anaqueles de alguna librería de mi pueblo.
Vencido me declaro vencido
cierro mi cuaderno muchas veces al día.
Y muchos otros pienso que escribo a pesar de todo
el poema que no leerá nadie
esa palpitación asmática en los anaqueles de alguna librería de mi pueblo.
* - * - * - * - * - *
.X.
El poeta
Es un saco de mierda.
tirado
al costado de las vías
protegido por perros sarnosos
envuelto en diarios
que no dicen nada.
Poemas pertenecientes al libro Semana Santa
(inéditos salvo “el poeta” que fue publicado por Pan comido ediciones).
Siempre lo leo despacio intentando no volver sobre su última palabra. Lo leo nuevamente para entender espacio por espacio.
ResponderEliminarSu palabra fuerte, su dolor muchas veces incógnita, sus imágenes convergen en poéticas que todo lo atraviesan.
Admiro tanta belleza en un dolor propio y ajeno.
Admiro profundamente la grandeza de este escritor y poeta.
Abrazo.
Abrazo
Marcelo, gran poeta. el libro de los árboles sogueros es un vértigo, una angustia en la garganta, una piedra preciosa que asfixia, un domingo, un aleph
ResponderEliminarJorge Rossi
busco tu alma detrás de tanta dureza. está. me seguis conmoviendo. susana zazzetti.
ResponderEliminarMarcelo: qué precisión en la construcción de tu mundo. Leerte es como visitar la casa de alguien que no ha nacido aún. Poesía oral, metálica, de ruidos furiosos, y con una consistencia pasmosa. Espero pronto otro libro tuyo compañero. Abrazo.
ResponderEliminarnicolás jozami
¡Eso! Esperamos el próximo libro. Marcelo Dughetti es un grande. Su poesía es un militancia profunda hasta un borde donde se extinguen las palabras. Y aunque se diga "alma mezquina", los que lo conocemos personalmente sabemos de su humildad y generosidad. ¡Grande, compañero! Un gran abrazo. Walter Giacomelli
ResponderEliminarGracias mercedes mil veces generosa conmigo.Gracias Walter,Nicolas Jorge porque viniendo de tres poetas y narradores y sabiendo de ustedes como personas se que el aliento nos es devolución de favores sino el sincero abrazo de los que estamos en la orilla del rio viendo pasar ese madero hinchado que bien puede parecer un muerto azul tan ahogado.
ResponderEliminarMarcelo Dughetti
me encata Marcelo cuántas cosas podés desentrañar con tan pocas palabras. uno aprende de tí la sencillez, la franqueza y ese inmenso dolor que perdura a través de las palabras éxitos y adelante!!!!!!!! liliana
ResponderEliminarMe parecio un buen libro los caballos de isabel aunque no se encuentra en librerias.Lo tuve que comprar en Cordoba
ResponderEliminarSusana Re.
Compañera y hermano gran gusto en leerte vamos por un nuevo ibro y un nuevo pais siempre con cristina
ResponderEliminarmarcelo garay
Palabras gigantes.
ResponderEliminarCada vez que te leo Marcelo te imagino enorme escribiendo desde allá arriba, con los ojos tristes, los sueños atormentados, entre las nubes y entre las vísceras, aún con ternura: "La respiración de un hijo acompasando la sangre".
Un gran abrazo
Juan R. Seia
Fabuloso poder de sobreactuación. Sus palabras transmiten un estado todavía no pensado. Por momentos lo tengo y por momentos no. Espero volver a leerte pronto.
ResponderEliminarQuerido amigo es cierto los poetas malos no son necesarios y los buenos tampoco lo unico necesario es la pala ,el pan de una mijer
ResponderEliminarGabriel Zucon
Gracias Liliana por el permanente apoyo nos conocimos hace tiempo ya y siempre apoyaste lo que hacia gracias por eso.
ResponderEliminarJuan querido ahora con la marca de ceniza te a hallado la poesia. Gracias por acompañar
Miguel no te conczco pero muchas gracias no se hermano como tomar lo de sobreactuación pero si es cierto que no siempre el yo del escritor es el yo del que narra. Un abrazo a los tres.
Marcelo Dughetti
La poeia salva al hombre y al poeta.hacen falta los malos poestas pero es cierto mas hace falta el feriado de la demana santa y el pan de una mujer
ResponderEliminarIvan
Feicitaciones poeta el tiempo nos diraque queda de todo lo que escribimos. Un abrazo
ResponderEliminarLeandro Cale
Felicitaciones amigo un camino duro el de la poeisa. Un garn abrazo.
ResponderEliminarGerman desde La Pampa
Donde puedo conseguir el monte de los arboles sogueros ya que no aprece en librerias.
ResponderEliminarFernanda
Del monte de los arboles sogueros podes encontrarlo en Libre Libros alli estamos todos los autores locales.
ResponderEliminarMarcelo Dughetti
Como siempre, leerlo me transita por una nube densa, donde me muevo a tientas, desde donde quiero salir corriendo. Pero vuelvo. A veces no sé qué siento al leerlo. A veces me parece que tanto dolor es "sobreactuado". Pero a veces, donde mi propio dolor me da frío y muerde, entonces, sé que no importa lo sobreactuado si se trata de hacer causa de ese maldito dolor que nos reventó la infancia. No sé si son necesarios los malos poetas, o los otros, pero sí sé de su derecho, y de mi respeto, a pesar de los pesares.
ResponderEliminarAbrazo
Alicia Perrig
Gracias Alicia por la lectura atenta y como usted sabe no hay dolor que no sea sobreactuado. El significado de la palabra persona ya lo dice.
ResponderEliminarMarcelo Dughetti
Por que identificar al poeta con el dolor cuando arroja una lamapara al futuro
ResponderEliminarAlejandro
Un muestra del depojo en el decir y movilizaroa
ResponderEliminarAlejandra Genta
Muy buena la idea de echar a los poetas de la republica remedo de auqella de Platon. No es mas que otra vuelta de aquello de que el arte es inutil gracias a Dios.
ResponderEliminarMario
El dolor no enseña nada pero sirve para escirbir
ResponderEliminarSergio
Ehh compañerito no lo hacia escribirndo estas cosas. Felicitaciones. Un abrazo del magisterio
ResponderEliminarSusana V.
Hace algun tiempo que seguimos a este amigo nos lee y lo leemos es una suerte tener este blog para volverlo a encontrar. Buena idea Felicitaciones Sr Falconi
ResponderEliminarPablo
De todos los poetas solo quedaran sus huesos y las cenizas de un poema continuo, algunas brazitas de Marcelo quedaran en el fogón final de la poesía universal o del interior del mundo. Amigo cada vez escribe mejor su biografia que son sus poemas y sus poemas que son la biografia final. un abrazo certero. Alexis Comamala
ResponderEliminarGracias hermano querido porpararte a comentar y alentar al maigo. Un abrazo a todos los caballeros de la tabla. Marcelo Dughetti
ResponderEliminarMe encantó el primer poema de Marcelo por la sensación de dolor y realismo que trasmiten sus versos. Habla de su personalidad sensible y plena de sentimientos.
ResponderEliminarte deseo el mayor de los éxitos
LILIANA
LA SENSIBILIDAD Y EL REALISMO QUE TRASMITEN LOS POEMAS DE MARCELO, SE ELEVAN HASTA DEJAR AL DESCUBIERTO LA FIBRA DETERMINADA DE SU PERSONALIDAD MARCANDO LA EMOCIÓN QUE DESPLIEGA FRENTE AL DOLOR. MUCHOS ÉXITOS!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarLILIANA
Gracias Liliana esta demas decir que me incluyo en los malos poetas. El poema esta dedicado a mi . Hablo conmigo con mi propia mediocridad y en cierta manera con la inutilidad del arte que a veces me parece bella y otras me carcome.Por eso desplazo lo necesari hacia otras cosas. Quiza si uno escribiera bien sentiria que sirve de algo ¿no?
ResponderEliminarMarcelo Dughetti
Me ha dejado sin palabras tanta amargura...no sé qué me ha impresionado más, si su biografía o sus poemas, en todo caso, percibo ciertos chispazos de luz en medio de tanta oscuridad.
ResponderEliminarCariños,
Juany Rojas
Tuve la suerte de decirte personalmente lo movilizante que son tus escrituras, pero aún asi, debo insistir en lo movilizante que son... Nunca deje de escribir, de esa manera seguirá desestructurando pensamientos...
ResponderEliminarLuz
Gracias por la lectura JUany por el tiempo y el comentario lucido.La bigrafia fue escrita en clave poetica.Cuando tengo que hablar de mi no se "hablarme" de otra manera. Marcelo Dughetti
ResponderEliminarMi voz se esta muriendo.Caballo muerto leon muerto cuervo muerto.Que pongan cruces de palo sobre la tumba de estos trea animales .Que corten la lengua con la cual les hablo.Que yaguen la encia blanca del desesperado.Qe despues olviden abrazando un recuerdo que dejo de emitir señal.
ResponderEliminarMarcelo Dughetti