Verónica Picco
Verónica Picco nació en Río Cuarto (Córdoba, Argentina) en el año
1973. Algunos de sus poemas circulan por blogs, páginas
web y medios gráficos de la provincia. Actualmente prepara su primer poemario
que pronto verá la luz en una editorial independiente. Vive en la ciudad de
Villa María con su familia donde cursa Letras, baña perros y cría sus hijos.
cómo pudo el ropero
anudarse a la manga de una prenda
y aliarse a este collage en mi cocina
no era solitaria en ese tiempo
mi casa ni la tuya
dormíamos panza con panza
calladitos
las orillas no siempre
son buenas compañeras
y aburrían
teníamos la garganta seca de charlarnos
los labios morados de mojarnos
y una mansa rabia
por la siesta.
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. Peluqueria canina .
uñas francesitas hociquean
por encima de las tapias vecinas
hay mujeres que se infectan
entre sí pienso
una pide el corte clásico
bien pelado ahí
abajo
así no ensucia cuando hace pis
otra más vieja
lo quiere peludito
para que duerma cálido
y entre sabanas de raso perfumadas
el verano exhibe complicidad
en algunas veredas
vaporosos pompones blancos
olfatean entrepiernas
y agradecidos lamen
los anillos sojeros
de esas manos siempre
tan
amas de casa.
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. Bio .
podría parafrasear al César
y decir:
“yo nací un día
que dios estuvo enfermo”
y unas sillas vacías de estudiantes
brindarían conmigo
igual que aquella noche
lo hicieron con mi padre
por esa ventana
de las vías
tres voces ene enes
si, inexorablemente debiera repetir:
“yo nací un día
que dios estuvo enfermo,
grave”.
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. Par es uno de
medias .
sabe el cielo del agua que derrama
a veces hasta el llanto
del sodero y la soda
no es fértil la tierra en tu maceta
sin mi humus
refuerzo de tus flores
y vale el viceversa
de más está mostrarte
los apuntes de costura práctica que guardo
tu conversación de néctar
este espejo.
en medio erraron leves mis mazorcas
golpeadas por la muerte
la jactancia
y el filo
leí al poeta en la silla
me deleité con el de los caballos
y en vos, nena escurridiza
bastaba con decirme
el lazo entre mi mano y tu birome
no confiere el sustento
… pero nada
mi humita y tu poesía se parecen
incluso desde lejos
por eso,
no quise tapizarte la bandeja
y compré las telas apacibles de verano
y alfileres sin punta
e hice todos los vestidos
cosí todo a los poemas
sin embargo
pega en donde nadie
tuya lluvia.
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. Ego .
la mosca
huevos en la piel
se expandirán por el tajo
imperceptibles
pronto
tendrá el foso
de carne
ejercito de larvas
la belleza de su obra.
